En una pequeña aldea, en el país de Irak ,cerca de la ciudad de Bagdad, vivía una valiente chica de unos 18 años, llamada Fátima.
Como es normal Fátima vivía en una familia musulmana, donde su padre Mohamed, le prohibió el derecho a estudiar. El quería que ella se casara, como habían hecho el resto de sus amigas, además había un chico muy bien avenido por la zona que la pretendía; he aquí donde erradicaba el conflicto existente entre Fátima y su padre, ya que ella tenía el sueño de poder estudiar y algún día trabajar en la televisión como periodista. Por lo que las peleas con su padre eran siempre constantes.
Ella a lo largo de su niñez quiso ir a la escuela, para poder aprender al igual que sus hermanos, pero era un sueño vano, ya que ella por ser mujer no tenía este privilegio. Ella veía como sus hermanos todos los días iban y venían a la escuela, y como contaban anécdotas de clase, mientras ella permanecía horas y horas cuidando de sus hermanos menores y ayudándole a su madre en las tareas domesticas.
Fátima, a base de mucho insistir durante muchos tiempo, consiguió convencer a su hermano mayor Alí, para que le enseñara a leer, escribir, sumar y restar, todo esto creo en Fátima que el deseo que ella tenía de ser periodista se fuera incrementando.
A la edad de 20 años y mientras el padre de Fátima estaba en tratos con la familia de aquel chaval que la llevaba pretendiendo desde los comienzos de su adolescencia, Ali realizo un viaje a Europa, del cual vino contentísimo por cuanto había aprendido y le conto a Fátima todos los derechos y libertades que poseían las mujeres de aquellos países. Por lo que Fátima se intereso y no paro de preguntarle.
Fátima pasaba horas y horas oyendo a su hermano todo lo que él había vivido en ese viaje, ella se quedaba con la boca abierta, oyendo todas aquellas cosas que le contaba, acerca de todos los derechos que tenían las mujeres en aquellas tierras, era algo impensable para ella.
Su hermano no paro de insistirle en que no se cansara de luchar por su sueño, y le prometió ayudarla para poder ir a la universidad de Bagdad. Por lo que Fátima pensó que si conseguía algún trabajo podría ganar dinero, y este dinero junto con el que le prestara su hermano Ali, podría irse a vivir a Bagdad y estudiar allí.
Durante este tiempo Fátima se tiraba las noches pensando cómo iba a realizar la huída, ya que irse a vivir a Bagdad, le conllevaba abandonar su casa, su familia y ser perseguida por ellos.
Trabajo duro durante 6 meses en la recolecta del opio, era un trabajo duro , ya que eran muchas horas expuestas al sol, pero Fátima no se rindió nunca ya que siempre tenía en mente su sueño.
Una vez ella vio que tenía dinero suficiente para poder partir a hacia Bagdad; Fátima no se lo pensó mas y a la noche siguiente de haber trabajado decidió plantear la huída, contacto con una amiga suya que estudiaba en la universidad y decidió irse con ella a vivir, esa misma noche hizo su maleta, recogió todos sus enseres, se despidió de todos sus hermanos y se marcho dejando atrás toda una vida de lucha, en busca de su preciado sueño.
Fátima ando y ando, hasta llegar a Bagdad, hacía mucho calor por lo que tuvo que parar varias veces en el camino a descansar, pero después de 15 horas caminando, consiguió llegar a la capital, en el lugar donde quedo con su amiga Miryam a la que llamo la última noche, llego a su nueva casa y allí descanso, después de haberle contado a su amiga todo lo que había hecho en todo este tiempo que no se habían visto.
A la mañana siguiente Fátima y su amiga se fueron a buscar trabajo, y encontraron una pescadería donde necesitaban una dependienta y cogieron a Fátima. Esta estuvo trabajando allí hasta que empezó la universidad, una vez empezó la universidad se dedico a estudiar y se saco la carrera con unas notas fabulosas donde la premiaron con una beca de investigación sobre los derechos de la mujer, en la cadena de televisión Alsharqiya,
Aquí Fátima después de mucho esfuerzo, consiguió realizar por fin su sueño y pudo ser periodista y a la vez le dieron un programa desde el cual se dedicaba a luchar por los derechos de las mujeres de su país, Fátima invitaba a mujeres que al igual que ella un día decidieron luchar por su sueño, el de poder estudiar siendo mujer.
NOMBRE: PABLO SÁNCHEZ RODRÍGUEZ