Hace bastantes años en una localidad pequeña cercana a Córdoba (España) mi vecina llamada Joaquina realizo el sueño que mantuvo con la esperanza de alcanzarlo toda su vida antes de dejar este tan maravilloso mundo para algunos y no tan fabuloso para otros desgraciadamente debido a las circunstancias que transcurren en la vida.
Esta chica a la edad de unos 7 o 8 años no podía acceder al colegio debido a que en aquellos tiempos (en la década de los 20) debía de ayudar a sus padres en la casa y en el campo (trigo, criando animales, etc) era la fuente de alimentación principal de esta familia y de la mayoría de habitantes del pueblo.
Ella nunca pudo acudir al colegio, no había tenido la suerte de tener una educación y aprender a escribir, leer (de manera razonable) en su infancia como otras personas que lo hacían y lo hacen actualmente; su única obsesión era que alguna vez pudiera aprender a leer y escribir para ser capaz de leer un libro ya que opinaba que “no era lo mismo realizar la lectura de un libro, periódico por sí misma que el contárselo otra persona”.
Durante el paso de los años muy joven se casó, se encargo de cuidar a sus hijos sobre todo tras la muerte de su marido a los pocos años y también a la situación que acontecía España con una dictadura fue perdiendo la ilusión de que algún día pudiera aprender e ir al colegio; se vio todavía más deseosa cuando observó como a los tantos años sus hijos iban aprendiendo una educación básica como la de leer e escribir pero a la vez contenta de que ellos supieran valerse por sí mismo.
A los 84 años de edad llegó la oportunidad que ella nunca jamás pensó que iba a cumplir y fue el poder acudir al colegio de adultos que se estableció en el pueblo ya que disponía de una buena salud, el único problema que tenía era que sus piernas ya estaban delicadas pero no sirvió de obstáculo gracias al profesor que impartía las clases que de manera amablemente la recogía de su casa, la dirigía al colegio de adultos y la traía de vuelta a su casa.
Finalmente cumplió su sueño y aprendió con esfuerzo y ganas a escribir y leer de una manera aceptable, y se dirigió al otro mundo contenta de haber cumplido su objetivo; no olvidaré una frase que ella me comento “aprovecha la oportunidad que te da esta vida porque muchos quisieran estar en la situación que tu estás”.
(Basada en hechos reales)
NOMBRE: PEDRO ÁNGEL HIDALGO LUNA
No hay comentarios:
Publicar un comentario